Niveles de radón

Viviendas

La normativa europea obliga a establecer un Plan de Acción Nacional contra el Radón . El Plan de Acción Nacional contra el Radón debe abarcar tanto las situaciones de exposición para la población en viviendas y recintos cerrados  como en los lugares de trabajo. El objetivo es establecer un punto de partida en viviendas, recintos cerrados y lugares de trabajo como a través de una primera medida de concentración de gas radón. Se propondrán acciones de remedio y seguimiento en los casos que la concentración de radón obtenida en la primera medida esté por encima de los niveles de referencia establecidos.

Edificios construídos

Para edificios ya construidos, el nivel de referencia para iniciar acciones de remedio será el recomendado por la Unión Europea de 300 Bq/m3 de concentración media anual de radón. No obstante, se pueden realizar medidas de remedio sencillas y económicas a partir de concentraciones de 100 Bq/m3. Siempre el primer paso para saber si es necesario realizar alguna remediación es medir de manera fiable y trazable la concentración de radón en la vivienda, tal como RadonFree ofrece. Tanto para el habitante y su familia como para el vendedor y/o comprador de una vivienda el conocimiento de los niveles de radón asegura su tranquilidad y revaloriza su propiedad, tal como se menciona en la Guía del Radón para el comprador y vendedor de viviendas, publicada por la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de los EEUU en el año 2002.

Edificios de nueva construcción

Para edificios de nueva construcción, en los que es más sencilla y efectiva la introducción de medidas destinadas a la reducción de los niveles de radón, se recomienda un nivel objetivo de diseño de 100 Bq/m3 de concentración media anual de radón. En varios países de la Unión Europea las viviendas nuevas poseen una Certificación acerca del cumplimiento de los niveles de radón, lo que sin duda revaloriza la compra y permite realizarla con total tranquilidad respecto a este riesgo.

Referencias

Lugares de trabajo

La normativa europea incorpora la obligación de realizar mediciones de niveles de radón en los lugares de trabajo. Además la Guía de Seguridad 11.4 y la Instrucción IS-33 del Consejo de Seguridad Nuclear establecen los niveles de referencia los lugares de trabajo y las medidas de remediación necesarias para corregir los valores superiores a los permitidos. Así pues la legislación actual establece los siguientes límites de concentración de radón (Rn-222) para lugares de trabajo:

  • Concentración de Rn-222 inferior a 600 Bq/m3: No es necesario control.
  • Concentración de Rn-222 en el rango desde 600 Bq/m3 hasta 1000 Bq/m3: Se debe aplicar un nivel bajo de control
  • Concentración de Rn-222 superior a 1000 Bq / m3: Se debe aplicar un nivel alto de control.

El nivel para la protección de los trabajadores debe ser de 600 Bq/m3 de concentración media anual, durante la jornada laboral. Por encima de los 600 Bq/m3, deben aplicarse las correspondientes medidas de protección radiológica. Radon0 ofrece una manera fiable y trazable de conocer los niveles de exposición al radón en lugares de trabajo para garantizar la protección de los trabajadores y tomar las medidas necesarias en caso de niveles demasiado altos.

Referencias

Mapa de Radón

Cualquier vivienda o lugar de trabajo puede contener radón en cantidades significativas que puedan suponer un potencial problema para la salud de sus habitantes. No obstante, existen zonas en España en las que, debido a su formación geológica, es más probable encontrar edificios con niveles elevados.

El Consejo de Seguridad Nuclear ha desarrollado la cartografía del potencial de radón en España, este mapa identifica aquellas zonas de España en las que un porcentaje significativo de los edificios residenciales puede presentar concentraciones superiores a 300 Bq/m3.

Mapa del nivel de gas radón en España

¿Qué es el potencial de radón de una zona?

Es el percentil 90 (P90) de la distribución de niveles de radón de los edificios de esa zona.

Por ejemplo, P90 de 300 Bq/m3 significa que:

  • El 90% de los edificios tienen concentraciones inferiores a 300 Bq/m3.
  • El 10% supera este nivel.